¡Las cantinas de la Ciudad de México, lugares únicos!
La Ciudad de México es un lugar cosmopolita en todos los sentidos, en ella interactúan todo tipo de tradiciones gustos, formas, colores y sabores.
Esto se refleja de manera maravillosa en la vida nocturna, que ofrece de todo.
Y aunque la modernidad siempre conlleva una cierto paso en eso de echar guateque, la Ciudad de México mantiene tradiciones que han estado presentes desde hace muchos años, como es el caso de ciertas cantinas, que han visto más historia que muchas generaciones juntas.
Las cantinas, el mesón, la fonda, la taberna, son expresiones de un México que a pesar del cambio generacional, sigue buscando la esencia de sus formas, algunas que se mantienen, otros se aferran a no desaparecer.
3 cantinas o salones legendarios de la Ciudad de México:
1.- La Opera
Era el lugar de moda para asistir hacia la segunda mitad del Siglo XIX. Es el establecimiento que alberga la famosa historia del balazo que Pancho Villa soltó hacia el techo en alguna borrachera cuando estuvo en la ciudad durante la Revolución Mexicana. Hoy día aún se puede ver el plomazo. Fue un lugar muy visitado por varios personajes ilustres, desde Porfirio Díaz, hasta Carlos Fuentes o Gabriel García Márquez.
2.- El Gallo de Oro
Inaugurada en 1874, es una de las más viejas en la Ciudad que aún están en activo. Desde inicios se convirtió en el lugar predilecto de poetas, políticos y otros famosos. Su menú de tapas es genial, uno de los detalles que hacen famoso al lugar.
3.- El Salón Tenampa
Este establecimiento, inaugurado en 1925, situado en la famosa Plaza de Garibaldi, tierra del mariachi, es sin duda uno de los predilectos por los capitalinos para ir a enfiestar y pasar un rato al puro estilo mexicano.
En sus paredes encontraras un ambiente lleno de comida, música e historia, con murales y otros detalle que te llevaran a revivir las épocas en las que los grandes del mariachi, como José Alfredo Jiménez y Chavela Vargas, se emborrachaban mientras entonaban canciones al puro estilo bohemio.
¡Las cantinas capitalinas, establecimientos llenos de historia, tradición y una que otra locura!